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Estás leyendo parte de la revista de Abril de 1994
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Servicio al Motor de Arranque |
| por Don Chaikin |
Cae una lluvia helada mientras abre la puerta
del automóvil en el casi desierto lote de estacionamiento. A medida
que gira la llave en el interruptor de la ignición, los sueños
de llegar a la casa para tomar algo caliente se desvanecen. En lugar del
familiar zumbido agudo del motor de arranque, no escucha nada. Brevemente
enciende los faros delanteros y alumbran con brillantez. Presiona el botón
del claxon, y suena fuertemente con claridad. Pero al girar la llave de
la ignición no consigue hacer nada para hacer girar el motor ni una
sola vez.
O, igualmente tan malo, el motor de arranque gira según hace girar
la llave, pero lo hace tan lenta y débilmente que no hay manera de
que consiga poner en marcha el motor.
Tal vez aún más frustrante es la posibilidad de que el propio
motor de arranque gire y lo haga bien. Sin embargo, claramente puede decir
que el propio motor no está siendo activado para dar vueltas. |
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grande y claro |
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| Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 47 - Abril
1994 - Número 4 |
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